"El mundo no se hizo en el tiempo, sino con el tiempo"

San Agustín

lunes, 9 de mayo de 2016

Hechizo- de Ramón Muñoz


Si hablamos de uno de los relatos más inquietantes que pertenecen a "Leyendas de la caverna profunda" (de venta en www.1libro1euro.es )ese es sin ninguna duda el que a continuación expongo, "Hechizo". Ramón Muñoz lo cedió gustosamente y demostró una vez más su buena técnica narrativa, concisa y muy bien escrita. Ingeniero y escritor de varias novelas de corte histórico, en este caso se atrevió con un cuento "infantil, de los de antes", como él ha dicho en alguna ocasión. Para mí, sencillamente, un texto genial.
Aunque el lector que se atreva debe estar preparado...lo advierto.

HECHIZO (fragmento)
La primera vez que Peluso mató a mamá estábamos jugando los tres en el salón.
Antes jugábamos en nuestro cuarto pero ahora nuestro cuarto es de Peluso y ya no podemos subir a jugar. Oímos un grito. Subimos a ver lo que pasaba y nos encontramos a mamá tirada en el pasillo. Parecía dormida, aunque nos dimos cuenta enseguida de que no lo estaba porque tenía abiertos los ojos y la boca. Chusín se echó a llorar, y Martita se echó a llorar. A mí también me entraron ganas de llorar, pero me mordí los labios con mucha fuerza y no lloré. Les dije que había que llevársela de allí. Peluso volvería pronto y haría cosas malas con mamá. Yo lo sabía porque había espiado varias veces a Peluso, al principio, cuando estaba empezando a cambiar, y había visto las cosas que le hacía a la gente que atrapaba en la trampa de fuera.
Cogimos a mamá por la cabeza y por las piernas y la bajamos por la escalera. Como pesaba mucho a veces se nos escapaba y teníamos que bajar corriendo para detenerla. Al final llegamos al último escalón y descansamos un ratito. Luego arrastramos a mamá por el salón. La sacamos por la puerta de cristal que da al jardín y la llevamos hasta debajo del olmo viejo. A ella le gustaba el olmo viejo. En verano sacaba una silla plegable y leía un libro en la sombra.
Cuando llegamos al jardín nos dimos cuenta de que había que hacer un agujero grande para que entrase toda dentro. La pala de papá estaba en el cobertizo pero el cobertizo estaba cerrado. Chusín y Martita trajeron sus palas de plástico y estuvimos intentado hacer un agujero hasta que las palas se rompieron porque la tierra estaba muy dura. Entonces decidimos que si no podíamos enterrar a mamá por lo menos la esconderíamos. Fuimos a buscar hojas y ramas y periódicos viejos y la escondimos muy bien. Sólo se veía un tacón del zapato y echamos arena encima hasta que desapareció del todo.
Mamá volvió una semana después. Era igual que antes sólo que estaba siempre cansada. Intentaba arreglar la cocina y enseguida se sentaba en una silla y se ponía a mirar a la pared, aunque papá todavía no estaba colgado en la pared. Estaba horas y horas mirando a la pared y al final salía de la cocina y subía los escalones muy despacio. Muy, muy despacio. Se metía en su cuarto y cerraba la puerta, y ya no la veíamos hasta que al día siguiente venía a hacernos el desayuno. Sacaba unas naranjas de la nevera para hacernos un zumo, pero el esfuerzo de cortar las naranjas y exprimirlas era demasiado para ella y terminaba dándonos un vaso de leche y galletas. Luego se sentaba y dejaba de prestarnos atención. Ni siquiera se había quitado las hojas secas del pelo.
A partir de entonces tuvimos que cuidarnos solos. Fue bastante duro porque los mellizos eran pequeños y yo también era pequeña, nada más que dos años mayor que ellos, y no sabíamos hacer casi nada. Pasamos hambre y sed, y nos ensuciábamos y nadie nos limpiaba. Con el tiempo aprendimos a preparar una comida y a limpiarnos con el papel de cocina. No lo hacíamos bien. Comíamos siempre lo mismo, porque era fácil de preparar, y cuando me miraba al espejo de la entrada me veía sucia y hecha un asco. Olíamos mal. Pero estábamos vivos. Seguíamos vivos.
Ramón Muñoz (fragmento de "Hechizo", relato perteneciente a la antología solidaria "Leyendas de la caverna profunda")

Ramón Muñoz (breve biografía)
(Madrid, 1971)
Como escritor ha publicado varias novelas históricas, la última de las cuales el año 2015, titulada "El Señor de Madrid" (Ediciones Pamiès) y varias colecciones de relatos centrados en temática fantástica, ciencia-ficción y de nuevo histórica. ("Transformándose", Ed. Mandrágora (2007) y "D de Destructor y otros relatos" ,Ed. Cyberdark (2015)) Además, también en el 2015, participó en una nueva antología de corte histórico llamada "Retales del pasado" junto a otros muchos autores versados en el género.
Aparte, ha obtenido los siguientes galardones:
 X Premio Pablo Rido de relato corto por Los ladrones de nubes
 XIV Premio Pablo Rido de de relato corto por En la casa del veneno
 XVII Premio Pablo Rido de cuento corto por Hacia el Survillión
 Premio Ignotus 2004 a la mejor novela corta por Imperio
 XI Premio Alberto Magno de relato por Bajando
 VIII Premio Domingo Santos de relato corto por D de Destrucción
Además de participar en diversas antologías, como la presente, y otras publicaciones.

3 comentarios:

  1. No conozco a este autor pero el fragmento del relato me ha encantado y, por supuesto, voy a tener que leerlo entero...así que, no me va a quedar más remedio que comprar el libro.Me parece una estupenda iniciativa
    Un saludo!

    ResponderEliminar
  2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  3. Buenos días, Charo.
    Para mí es de los relatos preferidos de la antología, y eso que me gustan todos, por muy diferentes que sean los estilos y el tema (dentro de la fantasía).
    Espero que disfrutes de la antología, por supuesto.
    Un saludo y gracias por dar tu opinión

    ResponderEliminar