"El mundo no se hizo en el tiempo, sino con el tiempo"

San Agustín

domingo, 13 de mayo de 2012

Presentación de "Numancia contra el tirano"

Alberto Lominchar es una de esas personas  que tengo el placer de conocer de manera viva. Con esto me refiero a "no virtual", como ahora viene a ser lo habitual cuando se frecuenta blogs, foros y facebooks varios. Con varios libros de poesía a sus espaldas y ya su segunda novela, es uno de estos escritores que promete. Humor, cultura, crítica social y ahora historia- en el  libro que se va a presentar al público en breve- se encuentran mezclados de forma amena en casi todo lo que he leído de él hasta ahora. Sin embargo, que yo sepa, Alberto no espera a que una editorial se fije en él para publicar- y menos en estos momentos. Desde el principio lo está haciendo de modo virtual y con presentaciones ocasionales. Lo que le importa es escribir, y eso lo lleva realizando desde hace años por puro placer. Sinceramente animo al público a que eche un corto vistazo a alguno de sus escritos si tiene la ocasión, y que compruebe por sí mismo.

Por lo pronto, el próximo viernes día 25 de mayo, a las 20:00 horas, en el bar la Tetería de la localidad de Aranjuez realizará la presentación de su nuevo libro "Numancia contra el tirano", un ameno escrito de corte histórico sobre la figura de un joven y desconocido Espronceda que sorprenderá a más de uno. Fielmente documentado, difícil por cierto según me comentó por la escasez de documentos que retratan el tema de la juventud del escritor romántico, y con pasajes que sorprenderán a más de uno y que son dignos de película, invito a los que puedan a pasarse y escuchar a este joven escritor hablar de un personaje que le obsesiona más y más según descubre nuevos datos sobre su apasionante vida y la de sus coetáneos.

Aquí dejo un corto fragmento.

Numancia contra el tirano- fragmento

Espronceda dejó aparecer su figura por el corredor abalconado del tercer piso de la casa de vecinos. Antes de que los de abajo pudieran interrogarle, Pepe Espronceda –todo cabellera oscura y rizada- exclamó:
- ¡Allá que voy!
Cabalgó sobre la barandilla del balcón y de ahí, con agilidad animal, se abrazó a un canalón de hojalata que desde el tejado bajaba al patio. El canalón crujió y se cimbreó, pero el muchacho llegó al final del descenso sano y salvo, para asombro del par que en el suelo le esperaba.
Saludó a Valls con un movimiento de cabeza y una radiante sonrisa, tendiendo después a Escosura ambas manos. Con doce años recién cumplidos, examinó a Patricio con una mirada penetrante y profunda que surgía de unos ojos negros, rasgados y exultantes.
En la forma de acceder a la cita, Patricio cayó en la cuenta de que Espronceda no era joven que gustara seguir los caminos trillados, las convenciones vulgares; necesitaba la atracción fascinadora del peligro. En él pudo ya adivinar al muchacho inclinado más hacia la acción que hacia la contemplación, gentil, amable, simpático y de reflejos felinos. La sinceridad de su amplia sonrisa le revelaba al zagal entrañable y más que constante en los afectos.
Superada la inicial sorpresa, Pepe explicó a los que le esperaban:
- He llegado a la cita antes de tiempo y, harto de esperar, me he puesto a trepar por el canalón para hacerle una visitilla a Antonio, el amiguete del tercero. ¡Qué se le va a hacer, no puedo parar quieto! En cuanto os he oído, me he dicho: “Pepe, muchacho, haz una entrada triunfal”. Y aquí me tenéis, dispuesto a lo que sea.
- ¿Lo ves, Patricio? –preguntó Valls-. ¿No te dije que aquí Pepito no nos iba a defraudar?
- ¡Ya lo creo! ¡Menuda entrada en escena! –exclamó Patricio-. A fe mía que nuestra espera ha merecido la pena.
- Pepe Espronceda –añadió el recién aterrizado, alargando su mano derecha hacia Patricio-. Para servirte en lo que gustes.
- Patricio de la Escosura –dijo, estrechando con firmeza la mano tendida-. Tu fiel camarada desde este momento.
Éste fue el curioso inicio de una amistad profunda y leal, que sólo la muerte pudo llegar a deshacer.



Alberto Lominchar Pacheco

http://erratico.bubok.es/

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