Voy a dedicar esta entrada a dichos populares de los que resulta curioso averiguar cuál es el origen. Solo para divertir.
Mas feo que picio
Por ejemplo, ¿alguien se ha preguntado de dónde viene la expresión "eres más feo que picio"?
Pues bien, según cuentan, un tal Francisco Picio, natural de Granada, fue condenado a muerte por razones desconocidas y ya en la capilla recibió el indulto. Tal fue su reacción que se le cayó el pelo y las cejas; además de ello le salieron tumores por toda la cara causando una visión espantosa. Cuenta la leyenda que el párroco que fue a darle la extrema unción, ató el crucifijo a la punta de un palo para no acercarse a ese rostro tan espantoso. Horripilante.
OK
Sí, habéis leído bien, Ok.
Se dice que en la guerra de Secesión estadounidense, cuando regresaban las tropas a los cuarteles sin sufrir una baja, en una gran pizarra se escribía OK (cero killed). De ahí proviene la expresión "Ok", que actualmente significa, como se sabe, "todo está bien"...
Ponerse las botas
Una expresión tristemente actual para los que hacen su agosto a costa de los demás...y ahí lo dejo.
Dicen que en la antigüedad, los pobres iban descalzos o calzados con alpargatas, mientras los ricos llevaban botas, entre otras razones para montar a caballo. De ahí que el hecho de "ponerse las botas" se relacione con algo bueno y provechoso.
Salvarse por los pelos
Antiguamente los marineros, aunque parezca mentira, no sabían nadar. Era por ello costumbre que se dejaran el pelo largo para que, si caían a la mar, los pudiesen agarrar "por los pelos" para salvarlos. Curioso, ¿no?
Tienes más cuento que Calleja
Saturnino Calleja Fernández (Burgos 1853- Madrid 1915) era un editor, pedagogo y escritor español, conocido también por los giros que daba a los cuentos y dichos populares. Por ejemplo, el soldadito de plomo cobraba vida por medio de la Virgen del Pilar,, o el Barón de Munchaunnsen pasó a llamarse Barón de la Castaña...etc, etc. A la famosa coletilla "fueron felices y comieron perdices", Calleja añadió "y a mí no me dieron porque no quisieron".
Se dice que alguien tiene más cuento que Calleja cuando tiende a exagerar las cosas o a inventárselas.
Vete al carajo
"CARAJO" se le llamaba a la pequeña canastilla que se encontraba en lo alto del palo mayor de las antiguas naves. Cuando un marinero cometía una falta se le mandaba al "carajo" en señal de castigo.
De este modo ahora, cuando queremos perder de vista a alguien, usamos la expresión "Vete al carajo" (a veces más lejos).
Ásí que eso me dispongo a hacer: me voy al carajo y os dejo en paz, por ahora.
Enhorabuena. Muy buena la entrada. Muchas de así hacen falta por la blogosfera, sí señor. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias, Francisco! Un placer verte por aquí de nuevo.
EliminarCurioso, muy curioso. A veces decimos las cosas como lo hacen los loros, sin saber su origen o significado.
ResponderEliminarMe gustan tus entradas, aprendes bastante.
Un saludo
Pues muchas, gracias, Jesús. Se agradece de verdad.
EliminarUn saludete