Una reflexión interesante del crack que es Daniel Franco.
Ahí la dejo.
El libro de la vida
El libro de la vida es tedioso
y redundante.
Escrito en letras de lo más minúsculas, enumera datos y cifras, describe
rincones escondidos, dibuja mapas olvidados y muestra diagramas de pasos de
bailes de moda y de antaño. Tantos detalles abarca que nadie podría siquiera
alzarlo de su sitio, por lo voluminoso.
Tiene capítulos enteros dedicados a la música, y se rumorea que toda la música
de allí proviene: habrá algunas tonadas que sean casi epifanías, pero en su
mayor parte son pavadas de estultos.
Fue escrito hace tanto tiempo que nadie recuerda siquiera haber comenzado a
leerlo, y uno siempre termina distraído con esas descripciones de cajitas de
obsequios, flores secas prensadas sobre poemas y algunos rizos sedosos atados
con listones de colores que aparecen sin motivo entre capítulos; son justo el
tipo de pequeños trofeos que todos nosotros somos demasiado chicos para
entenderlos…
Y mi único rezo es que quieras leerme más páginas, aunque no puedas saltarte ni
un solo renglón.
Daniel Franco
http://levedesliz.blogspot.com.es/
Muchas gracias por compartir este texto con tu audiencia. Espero que todos sigamos leyendo ese libro, aunque a veces nos aburra hasta el llanto…
ResponderEliminarSaludos,
D
Me gustó el tema y la forma tan poética con que lo has abordado, Daniel.
ResponderEliminarComo tú dices, el libro de la vida abarca desde lo más asombroso, sublime y genial (pasando por el más soporífero aburrimiento) hasta las profundidades más obtusas.
Un abrazo